El segundo material más usado por la humanidad, después del agua, es el concreto. Este se encuentra en calles, casas, edificios, plantas, presas, entre otros. Los humanos consumimos aproximadamente 3 mil millones de metros cúbicos de concreto por año y, para producirlo, se utilizan arena y grava extraídas de minas, según el Ing. Manuel Sirtori Caparroso, Director de Concreto y Agregados de Holcim México.
Es por esto que la firma ha desarrollado y lanzado ECOCycle®, una tecnología de Holcim para promover el concepto de economía circular. “En un lugar como la Ciudad de México, cada vez que construimos un nuevo edificio, usualmente demolimos otro. Lo que sucede hoy es que estos productos de demolición terminan en un botadero, con todas las consecuencias medioambientales que conlleva”, señaló Sirtori.
El concepto de economía circular en el que se basa ECOCycle® implica la reutilización de materiales para construir nuevas estructuras. Los desechos de una demolición contienen ventanas, puertas, techos y lavamanos, pero también la estructura que, al ser demolida, puede llevarse a una planta para su tratamiento y reutilización en la producción de concreto. “ECOCycle® es una tecnología que toma materiales de demolición, los procesa y los convierte en nuevos agregados, que luego se integran en concreto nuevo para construir nuevas estructuras”, explicó Sirtori.
Holcim se ha convertido en la primera empresa en México y Latinoamérica en el sector de la construcción en lanzar concreto premezclado que incorpora agregados reciclados en su formulación. Las plantas de concreto ubicadas en Arvide, Naucalpan, Xalostoc e Iztapalapa (Ciudad de México) han completado con éxito las pruebas de la tecnología ECOCycle®, permitiendo la creación de un portafolio de productos de concreto Holcim Clásico que utilizan materiales reciclados de la construcción y demolición. Esta innovación no solo reduce el uso de agregados vírgenes sin comprometer el rendimiento del producto, sino que también disminuye significativamente la huella ambiental.
BENEFICIOS
Manuel Sirtori indicó que, al reutilizar los desechos de las estructuras, se reduce la necesidad de crear nuevos materiales a partir de recursos naturales extraídos de minas. “Hoy, la tecnología podría ayudarnos a reducir entre un 20 y 25% el empleo de materiales nuevos. El segundo impacto es que todas las demoliciones terminan en un botadero. Solo en la Ciudad de México se producen entre 14 y 15 mil toneladas de productos de demolición por día, más de 10 millones de toneladas al año. Con ECOCycle® podemos ayudar a reducir esto, tomando parte de esos agregados de desecho, procesándolos y reutilizándolos para hacer concreto nuevo, dejando de consumir materiales vírgenes que salen de una cantera o una mina”, explicó Sirtori.
A nivel económico, el uso de este innovador material reduce costos al no utilizar materia prima nueva, bajo un concepto llamado minería urbana, que reutiliza los desechos constructivos. No obstante, esto requiere un esfuerzo conjunto entre empresas, universidades y gobiernos. Sirtori enfatizó los retos en materia de legislación, aunque reconoció que en la Ciudad de México se está avanzando en este ámbito.
Finalmente, mencionó casos de éxito del nuevo material. En Francia, por ejemplo, se está construyendo el primer edificio 100% reciclado con tecnología Circular ECOCycle®. Además, en la Ciudad de México ya está autorizado el uso de ECOCycle® en bordes o reparaciones de calles, pues la legislación lo permite. Sin embargo, Sirtori resaltó que aún hay mucho por hacer para llevar esta iniciativa de uso de agregados reciclados a partir de desechos de demoliciones a nivel federal.
18/09/2024
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