El edificio sustentable de madera más alto de Latinoamérica se construirá en la ciudad de Coyhaique, Chile. Se trata del “Proyecto Tamango”, que planea erigir el primer edificio de madera contralaminada (CLT) de América Latina, así como el de mayor altura de este material en la región. La obra está a cargo del estudio de arquitectura e ingeniería Tallwood.
El proyecto recibió recientemente todos los permisos necesarios por parte de las autoridades para levantar los 12 pisos del edificio en la ciudad chilena de Coyhaique, puerta de entrada a la Patagonia. Juan José Ugarte, el arquitecto de la firma a cargo –junto con el arquitecto Gerardo Armanet y el ingeniero estructural Juan Acevedo-, dio a conocer que las obras comenzarán a finales de 2023, una vez que finalicen el proceso de financiamiento.
Curiosamente, estos períodos de autorización de permisos y de financiamiento serán más largos que el tiempo en sí de la construcción, pues cuando arranquen propiamente las obras, aseguran que no tardarán más de 45 días en acabar el edificio. Esta velocidad constructora se debe principalmente a la peculiar tecnología para el armado del inmueble.
Es decir, el edificio se trabajó primeramente con un preciso modelo de información de construcción (BIM), donde el equipo detalló cada panel y su ensamblaje futuro. Una vez todo el material, personal y herramientas necesarias reunidas en el sitio de construcción, las estructuras de los paneles se unirán como un gigantesco rompecabezas.
3.000 PIEZAS DE MADERA
La sustentabilidad, tema cada vez más prioritario a nivel global, es la razón fundamental en la construcción de Proyecto Tamango. Su materia prima consiste en 1.870 m3 de madera con 3.000 piezas de madera laminada cruzada (CLT) y de madera microlaminada (LVL), fabricadas por la empresa sueco-finlandesa Stora Enso, para el edificio de 19.700 m2, con un zócalo de 2.500 m2 de dos niveles, para comercio y oficinas cowork, y una torre de diez pisos con 8.500 m2, para 68 departamentos residenciales y tres subterráneos –de 8.700 m2 en total-, de 220 cajones de estacionamiento.
Los constructores dieron a conocer que cada árbol utilizado para la construcción del edificio es reemplazado, y que esta alternativa sustentable al hormigón contribuye a la limpieza del aire: un metro cúbico de hormigón emite 1,6 toneladas de efecto invernadero, mientras que la misma medida en madera CLT (también llamada contralaminada), retiene unos 800 kilos de dióxido de carbono (CO2).
De tal modo, se calcula que, en total, la construcción de la estructura, más los elementos como losas, columnas y vigas, capturará unas 4.000 toneladas de C02. Además, de acuerdo a la Engineered Wood Association, los paneles prefabricados de CLT y LVL se han estudiado ampliamente, arrojando que ofrecen calidad y seguridad.
Se componen de varias capas prensadas de tableros de madera secados en horno, apilados en direcciones alternas y unidos con adhesivos estructurales. Las capas le dan al panel rigidez estructural en ambas direcciones. De hecho, al CLT se le ha llamado "el hormigón del futuro", pues diversos estudios demostraron que posee una superior resistencia estructural que el hormigón armado, con un alto grado de flexibilidad. Por ejemplo, 1 m3 de hormigón pesa unas 2.7 toneladas, y 1 m3 de CLT pesa 400 kg, entregando la misma resistencia.
16/01/2023
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